Hotel Casa Cristobal
Servicios principales
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Wi-Fi gratis
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Servicios 24 horas
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Entrada/Salida exprés
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Agradable para niños
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Desayuno
Ubicación
El Casa Cristobal Hotel está situado en el centro de Cuzco, a apenas 1 km del Sacsayhuamán. Situado a pocos minutos en coche del Templo del Sol, el hotel cuenta con 12 habitaciones con vistas al jardín.
El centro de Cuzco se encuentra a 20 minutos a pie de este hotel, y atractivos culturales como el Museo de Arte Precolombino Cusco están a menos de 11 minutos a pie del sitio. El Casa Cristobal está justo al lado de la Iglesia y Convento de Nuestra Señora de la Merced y a 10 km del aeropuerto Internacional de Cuzco. Los huéspedes pueden acercarse fácilmente a la historia de Cuzco visitando el Yacimiento de Quenqo, ubicado a 1 km de este lugar. La estación de autobuses Pavitos - 10 soles Combis to Ollantaytambo, que permite una buena conexión con toda la ciudad, está justo al lado del Casa Cristobal Hotel.
Las habitaciones incluyen un patio y un vestidor, así como TV de pantalla plana con canales vía satélite para tu comodidad. Las habitaciones disponen de un baño privado con secadores de pelo y artículos de tocador para huéspedes. En las habitaciones encontrarás almohadas no alergénicas, almohadas hipoalérgicas y almohadas blandas o duras antialérgicas. Los cuartos de baño disponen de un inodoro separado de la ducha y ducha, además de secadores de pelo y artículos de tocador para huéspedes.
El restaurante la Morena Peruvian Kitchen se encuentra a tan solo 300 metros del hotel y ofrece comida latina.
Reseña de un crítico de hotel
Recientemente tuve el placer de alojarme en Casa Cristobal Siete Cuartones Casona Colonial, un rincón encantador en el corazón de Cusco. Desde el momento en que llegamos, el personal nos hizo sentir como en casa, destacando la amabilidad excepcional de Antony, quien estaba siempre dispuesto a ayudarnos con una sonrisa. Las habitaciones son acogedoras y están decoradas con un gusto exquisito, perfectas para descansar tras explorar la ciudad que, por cierto, está a solo unos minutos a pie de la Plaza de Armas. El desayuno, una maravilla, combinaba opciones continentales y americanas que deleitarían hasta al más exigente de los paladares. Además, el servicio de lavandería fue una bendición después de nuestras caminatas; realmente apreciamos la disposición del personal para ayudar con cada necesidad que surgía. En resumen, esta experiencia fue simplemente increíble; un lugar donde el encanto de lo antiguo se une con el confort moderno. ¡No puedo esperar para volver!